PLAZA PROFR. JOEL RODRÍGUEZ NAVA 1962 – 2006.

El año de 1962, fue un despertar educativo en Mineral de Bustamante, Tamaulipas; pues el intenso trabajo se manifestaba de mil formas. El nuevo edificio escolar rompía con la escuela tradicional (edificio antiguo a un lado de la tienda de don Panchito Ruiz o muy cerca de las otras tiendas de don Jacinto Trejo Hernández y Don Miguel Aguilar Hernández, más tarde se instalaría “La Elsa” de don Candelario Coronado, donde hoy despacha el padrino Ramiro Díaz Serna).

Tocó a la administración municipal de don Carlos Trejo Nava, iniciar el nuevo edificio de la escuela primaria “Alberto Carrera Torres”, por coincidencia, destino, gestión, azar o lo que halla sido y a su primo C. Juan Verber Nava, verlo culminado, éste último, informó a las autoridades educativas superiores que la escuela primara “Alberto Carrera Torres tenía más de 300 alumnos y solamente cuatro maestros, porque los demás gozaban de licencia médica, según oficio del mes de octubre de 1962. El supervisor escolar tenía su oficinas en Palmillas y la zona escolar era la número 25 dirigida por el profesor Delfino E. Sierra, mientras que el Director Federal de Educación en el Estado, se llamaba Severiano Gómez Ontiveros.
Por esos años Mineral de Bustamante, tenía banquetas empedradas en las fincas principales y rara vez en casas esquineras de dos aguas, tajadas con soyate la mayoría y una que otra metida en los amplios solares con una culata redonda que servía como bodega o troja donde las ratas se daban gusto en los grandes chapiles de maíz y no faltaba quien de la familia mayor, como los abuelos; dijeran por las noches: ¡No dejen afuera el gato, suéltenlo en el chapil para que se acaben las ratas!

De veras, era muy común ver los grandes pedazos de corazón de palma, madera u algunos morillos cortos debidamente amarrados a unos postes que servía de retranca al mundo de mazorcas y algunos presumían al decir, nosotros le hicimos un agujero al techo para llenar la casa de cosecha.
Bueno, para terminar este trozo de relato callejero, también recuerdo que las calles eran unos arroyos, llenos de contras por diferentes partes, piedras sueltas; de tal manera que al hacerse un pleitos hasta las mujeres agarraban su piedra y el que estaba en el suelo, con un manoteo rápido lograba tener su piedra y descontar al enemigo y otros las hacían rumbar de un extremo a otro para defenderse,... y no le sigo porque puedo hacer llorar de emoción a mas de tres lectores de la villa.

Tal vez diga usted, de eso no estábamos ablando, pero viene al caso porque precisamente la educación vino a cambiar la cultura de muchos niños después jóvenes. En mi situación ver la ristra de salones y el movimiento de gente, ya me daban ganas de ir a la escuela, pero todavía no podían aceptarme, sin embargo recuerdo mi primer día de clases, cuando nos recibió con un aplauso la maestra Dominga, muy bonita por cierto. Cuando uno es niño su maestra es la más hermosa del mundo y no se la toquen.
Precisamente en ese año de 1962, nació al igual que muchos niños y niñas de su época, el niño Joel Rodríguez Nava, sus padres los señores: Sabino Rodríguez Obregón y Ninfa Nava Aguilar, había llegado el primogénito un 13 de mayo y poco faltó para que naciera con el título natural de maestro, pero el tiempo se lo daría gracias a sus estudios. Don Severo Rodríguez Sánchez y Dona Inés Obregón, vivían muy cerca de nosotros, una cerca de palos y alambre nos dividía, de tal manera que cuándo existía la oportunidad la brincábamos unos y otros, dijo unos y otros porque jugábamos, Isidoro, Aníbal, Hugo, mi hermano J. Ascensión un servidor y ya Joel y Juan empezaban ha vernos jugar en el columpio, las canicas o el trompo.
Cuando Joel empezó a ir a la escuela, recuerdo que su padre le tomaba la tarea y le pedía cuentas de las mismas, se veía que era listo y de conocimientos rápidos, quedando demostrado cuando inició a obtener los primeros lugares en la primaria, secundaria y en la normal le perdí la pista, pero comentan que siempre tuvo buenas calificaciones.

Los estudios del profesor Joel Rodríguez Nava, los realizó en la escuela primaria “Gral. Alberto carrera Torres”, de 1968 a 1975, en la escuela secundaria técnica número 37 “Jesús Reyes Heroles”, de 1975 a 1978, ambas en la villa de Mineral de Bustamante y los estudios de Normal Básica en la Escuela Normal Rural del Desierto, ubicada en el Cedral San Luis Potosí, S. L. P. De esta institución educativa han egresaron muchos bustamantenses y de la región Ixtlera de México, iniciada por la Maestra Amina Madera Lauterio por el año de 1975. Maestra que salvó a muchas generaciones de profesores al iniciar su apostolado educativo, al igual que el Profesor y Licenciado José Luis García García en San José de las Flores, Municipio de Güemez Tamaulipas con la Normal Rural de Tamaulipas, “Maestro Lauro Aguirre”. Apoyado por un puñado de maestros, alumnos y padres de familia en noviembre de 1976.
Al recibirse como profesor de educación primaria en el año de 1983, se desempeñó satisfactoriamente en las escuelas primarias de los Ejidos: Congregación Joya de Maravillas 1983, Emilio Vázquez Gómez 1983 – 1988, Lázaro Cárdenas 1988 – 1991, en el Municipio de Tula, Tamaulipas, y de 1991 a 2006 en la escuela primaria “Revolución Mexicana”, del municipio de Reynosa, Tamaulipas.

Contrajo matrimonio con la Señorita Martha Alicia Hernández Pérez, el año de 1992. Los hijos del profesor Joel Rodríguez Nava son: Ariel Yussef, América Izamar, Brayan Alexis y Sergio Joel Rodríguez. El día 28 de julio del 2006, mientras jugaba Vol.-bool., con sus compañeros de siempre en la plaza del patolar, lo sorprendió la muerte en forma rápida y sin poder hacer algo extraordinario para salvarlo, en los brazos del amigo Rogelio González Rodríguez, quién le prestó auxilio de forma expedita, pero ya no fue posible regresarlo a nuestro mundo, Dios había dictado la última palabra.

En corto tiempo, la plaza jugó un papel muy importante en la vida política municipal que empezó a dar rumbo a las autoridades actuales, ( 22 de abril del 2007). Un día antes en mi columna A Fuego Lento II, decía lo siguiente:
Esta Plaza, debe llamarse “Profr. Joel Rodríguez Nava”, y los regidores del PAN, se han tardado en hacer la propuesta ante el Honorable Cabildo, que preside el C. Julio Torres Torres, hay elementos suficientes, necesarios y sobre todo es un derecho que le asiste a este joven luchador social ejemplo de constancia a un lugar que siempre frecuentó, para compartir momentos deportivos con la gente de su pueblo y todos los vecinos conocen que ahí inició su viaje sin retorno, jugando con sus amistades sanamente.

En estos momentos y después de varios tramites de propuesta ante el cabildo que dirige el Profesor José Antero Medina Cruz, podemos decir: “ Que por acuerdo del mismo, la Plaza, lleva el nombre del Profesor Joel Rodríguez Nava” . Seguramente se tenía acordado hacerlo al público el pasado 28 del mes en curso, pero las actividades y la falta de alumnado en las instituciones, se pasó por alto, aunque los vecinos comentan que ya se instaló, la propuesta ante el lugar no importa, el resultado es el que cuenta y la seriedad de hacer bien las cosas, reanima a la ciudadanía. Algunos dicen que ya tenía nombre la plaza y efectivamente, en una piedra laja dice: Plaza Profr. y Gral. Alberto Carrera Torres, construida por Carlos Trejo N. Presidente Mpal. 1990 – 1992. V. Bustamante, Tam. ( Pero no existe acta de cabildo que le dé el nombre oficialmente y así está la 20 de Noviembre, que inicialmente, se llamó “Benito Juárez”.

PD. Saludos para mi amigo Juan Antonio Robles y su apreciable familia, originario de ciudad Tula Tamaulipas. Del barrio del cerro del aire.

Por: J. León Rodríguez Zúñiga
Cronista Municipal