Sesenta y un años o más de dominio colonial en la jurisdicción del Real de los Ynfantes, bastan para dar testimonio del poderío de Don José de Escandón durante la colonización del Nuevo Santander.
Si la fundación fue el 26 de mayo de 1749 y que para el mes de septiembre de 1810, arroja justamente 61 años y meses de dominación colonial.
La Jurisdicción del Real de los Ynfantes (dominio de gobierno) comprendía todo el territorio del municipio de Miquihuana y Mineral de Bustamante, hasta el 26 de octubre de 1828. Por ello el valle de la Miquihuana pertenecía en 1810 al Real de los Ynfantes, gobernando por el Teniente de fuerza Mayor Don Pedro José de Saldaña y el gobernador de la Providencia de San Carlos, Don Manuel de Yturbe e Yraeta.
Retomando el tema de los 61 años de colonia, debo aclarar que los capitanes que gobernaron el Real de los Ynfantes fueron:
1. Francisco Lázaro de Salazar 1749 – 1750
2. Antonio Nicolás Santiago del Castillo 1751 – 1766
3. Juan Ignacio Félix del castillo 1767 – 1780
4. Don Antonio Ignacio Álvarez 1781 y no se tiene el dato de cuando terminó su gobierno.
5. El que estaba en 1810 era sin duda alguna Pedro José de Saldaña.
En el aspecto religioso, impartía la doctrina a los pobladores del Real de los Ynfantes y la misión existente en el lugar el Padre Franciscano: Fray Ignacio de la Torre (1809-1810). Mientras que en San Antonio de Tula, lo hacía Fray Vicente Victoria, (1810 – 1816) y en 1811 se le agregaron Fray Vicente de la Parra y don José María Gómez de Castro.
Los párrocos que durante la colonia vivieron en el Real de los Ynfantes, estuvieron en su mayoría bajo el cuidado de los capitanes de la Villa y Jurisdicción de Real de los Ynfantes y claro que acudían a los núcleos de indígenas que vivían en el Paraje del Gavilán, la Mesa de Guadalupe, el Rincón de Santa Efigenia y el Paraje del Pantano hasta que se establecieron en la propia Villa del Real, en la parte norte de la iglesia y otros en el poniente, por ello se conocía como el "Barrio de los Pames" y la "Missión del Cerro de la Cruz". Los Padres que iniciaron las conversiones o iniciación en la religión católica fueron: El Padre Fray Nicolás de Salas de la Misión de San Antonio de Tula 1749, El Padre Salazar 1750, Fray Domingo Guillén 1750 – 1760, Fray Ygnacio Núñez Camargo, 1761 al 10 de diciembre, Fray diego Pedros o Pedroza 1771, Fray Nicolás Gorgonia Hurtado de Mendoza 1773 – 1777, Fray Ignacio Núñez Camargo 1778, Fray Diego Paredes y Fray José Varrón 1780, Fray Diego Paredes y Fray José Varrón 1781, Fray José Varrón 1782, Fray Juan Manzano 1785 – 1786, Fray Diego Paredes 1787 (un tiempo corto), Fray Tamayo 1787, Fray José Antonio Pedroza (Pedros) 1789 – 1790, Fray José María Santoy 1790 – 1791, Fray Victoriano Borja 1792, … , … Después y hasta 1810, los Padres duraban muy poco entre un año y dos, por ello se estancaron los trabajos de la construcción parroquial.
Los diferentes castigos, abusos, vejaciones, despojos, e injusticias, practicados con los grupos indígenas, hijos de criollos, criollos y párrocos de los pueblos; por los españoles, dieron motivo basto para que se organizaran los inconformes con la opresora clase colonial.
Si en Dolores Hidalgo, Guanajuato, se inició el 16 de septiembre de 1810, la lucha por la Independencia, en el Nuevo Santander llegaría la notica hasta fines de septiembre del mismo año, en forma muy tenue, incierto, comentado, prohibido o tal vez distorsionado.
Pero la realidad que se vivía, encontraba empatía en una lucha por liberarse del mando español, fue así como don Miguel Hidalgo y sus compañeros independentistas, encontraron eco en San Antonio de Tula y la región de influencia que por supuesto fueron: Real de los Ynfantes, Xaumave y Palmillas.
En San Antonio de Tula, empezaron a reunirse secretamente, Mateo Acuña, Bernardo Gómez de Lara, Martín Gómez de Lara, Francisco Ramos, el gobernadorcillo de indios Reyes Pérez y Lucas Zúñiga en la casa del último.
Una vez madurado el plan de lucha y encabezados por el agricultor Mateo acuña, quien vendía sus animales para costear la insurgencia, fue así como dieron por hecho el primero de noviembre que ya estaban listos para iniciar el movimiento después de varias discusiones internas y probables temores de ser traicionados por algún integrante. Fue hasta el 4 de diciembre en que Bernardo Gómez de Lara, mató al guardia del cuartel de la guarnición española, penetró al edificio, sacó las armas que pudo, las aventó al pueblo y se dio inicio a la lucha por la independencia en Santander, para el 12 de diciembre, fiestas de la Virgen de Guadalupe, los insurgentes victoriaban por las calles: ¡Viva la Virgen de Guadalupe y mueras á España!(Don Manuel Villasana Ortiz).
Los habitantes de Real de los Ynfantes, tuvieron información de primera mano, pues su cercanía con los insurgentes era estrecha, una vez que los indígenas también tenían su gobernador, un párroco que sufría las carencias y que seguramente compartía la Independencia. Prueba de ello es que no permaneció en la parroquia de San Miguel Arcángel y se vió solo el templo, los indígenas se desbalagaron remontándose a la sierra o tal vez se fueron a engrosar las filas de los insurgentes a través de su gobernador. Pero lo que si es un hecho, inapelable es que los años 1811 y 1812, no existió párroco en la Villa, pues acotando el dato, una vez iniciada la Independencia desde San Luis Potosí por Villerías y Herrera, personajes que apoyaban a los insurgentes tultecos.
Efectivamente, la insurrección de San Luis y la del Nuevo Santander dábanse la mano en Tula. Villerías al ser rechazado por Calleja, penetró en la provincia de Santander al igual que el General Carlos Diez Gutiérrez en tiempos del Plan de Tuxtepec (1876), por la parte de los límites de San Luis con Santander y se hizo llegar hasta el Valle de la Miquihuana, Jurisdicción de Real de los Ynfantes, exploró y se dio cuenta que toda la región estaba insurreccionada, varios pobladores se agregaron a su causa, pero el realista Arredondo, posesionado en Palmillas, mandó una sección de su ejército abatir (enfrentar) a Villerías en el punto llamado "EL TANQUE COLORADO" (ubicado probablemente en jurisdicción de Real de los Ynfantes, entre Palmillas y la Miquihuana), donde tuvieron un encuentro, siendo dispersados los insurgentes, esto ocurría en los primeros quince días del mes de mayo de 1811.
No podemos negar que varios pobladores de Real de los Ynfantes, hayan participado en la lucha por la Independencia, pues Tula – Real de los Ynfantes – Mineral de Bustamante, históricamente han sido pueblos hermanos, nada más que la historia no registró en su momentos a los pobladores que asistieron a esa cita histórica, un servidor esta seguro de la participación directa de varios hermanos en 1810, de otra manera, no se hubiera quedado solo el pueblo por varios años, a grado tal de estar al mando de las autoridades de Palmillas a partir de 1812 al 29 de marzo de 1816. Uno de los párrocos informó que la población estaba asustada y temerosa por los maltratos que hacían los realistas, quienes mataban, ahorcaban y hacían barbaridades con los simpatizantes a los independentistas.
Res non verba.
P.D. Por medio del presente, me uno al dolor de la familia Silva Hernández, misma que hacen unos días, perdieran a su madre, Doña Rosenda Hernández de Silva. Espero que muy pronto encuentren el consuelo ayudados por el creador de de todas las cosas. DIOS NUESTRO SEÑOR, REY DE REYES Y CONSOLADOR DE NUESTROS GRANDES CUIDADOS. Lo hago extensivo, para todos mis hermanos que han pasado por ese momento incierto.
A FUEGO LENTO III Por. J. León Rodríguez Zúñiga Cronista Municipal Correo electrónico: J.LEONRZ@hotmail.com.
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